Alemania pide apoyo a los socios del sur de la UE para superar la crisis del gas: «La solidaridad debe regir para todos»

Alemania pide apoyo a los socios del sur  de la UE para superar la crisis del gas: «La solidaridad debe regir para todos»

El canciller alemán, Olaf Scholz, ha pedido a los socios comunitarios, incluido España, solidaridad para afrontar la crisis energética derivada del recorte de suministros de gas por parte de Rusia y que afecta principalmente a Alemania.

«La solidaridad europea debe regir para todos», declaró este viernes el canciller, que como hiciera la víspera su vicecanciller y ministro de Economía, el verde Robert Habeck, apoyó expresamente la propuesta de la presidenta de la CE, Ursula von der Leyen, para, a través del ahorro generalizado, cubrir las necesidades energéticas de quienes está en situación de riesgo. La medida de emergencia -que se percibe ampliamente como diseñada para salvar a Berlín en caso de que su enlace de gas con Rusia, el gasoducto Nord Stream, deje de funcionar- permitiría al ejecutivo de la UE imponer un recorte obligatorio del 15% en el consumo de gas de agosto a mayo. Esta medida podría «activarse en cualquier momento», en caso de que la escasez de suministros hiciera necesario el reparto entre los vecinos de la UE.

Polonia, Portugal, España, Chipre y Grecia ya han dicho enfáticamente «no» a la toma de poder que Bruselas se otorga con ese plan, que requiere una mayoría cualificada para su aprobación. Hacen falta 15 países que representan el 65% de la población del bloque y no se permite el veto. Hungría ha dado un paso más, anunciando que no tiene intención de dejar salir ningún gas de sus fronteras a partir del próximo mes. De hecho, el Ministro de Asuntos Exteriores húngaro, Péter Szijjártó, tomó un vuelo a Moscú el jueves en un intento de comprar más suministros rusos mientras sea posible.

Scholz enfatizó que el plan de la Comisión incluye propuestas «diferenciadas» que tienen en cuenta el consumo, las estructuras de importación», por lo que es, a juicio de Scholz, es equilibrada, además de contemplar situaciones como la de la península ibérica.

El canciller respondía así al rechazo de expresando por la ministra española de Transición Ecológica, Teresa Ribera, quien respondió a Bruselas que los españoles «no han vivido por encima de sus posibilidades» en materia energética.

«Todos estamos confrontados a grandes retos, ningún país puede decir que la subida precios no les toca y que no le afectan los retos relacionados con gas», insistió el canciller.

La iniciativa elaborada por la CE, que está pendiente de la aprobación de los Veintisiete por una mayoría simple, lo que Scholz no duda que se alcanzará. «»Veo las discusiones con optimismo y estoy convencido de que primará la solidaridad comunitaria», afirmó, antes de incidir en que el problema generado por los suministros de gas ruso es algo «global» y «no de un solo país».

Los ministros de Energía de la UE tienen previsto debatir la propuesta y la inminente crisis invernal del gas en su reunión del próximo martes, pero para entonces la propuesta de la Comisión podría ser ya una causa perdida. Las capitales no quieren renunciar al control sobre el uso de la energía.

Ante la falta de quórum para aprobar el plan de Bruselas, l vicecanciller alemán Robert Habeck criticó el jueves a los países que no están dispuestos a subirse al carro.

«Tenemos que ahorrar energía en Europa, y sobre todo gas», dijo Habeck en una rueda de prensa. «Y eso significa también que los países que no se ven directamente afectados por las reducciones de gas procedentes de Rusia deben ayudar a otros países. De lo contrario, no habría solidaridad europea».

Los únicos países que se han alineado con hasta ahora con Alemania son Dinamarca, Luxemburgo y Países Bajos. Francia, Bulgaria e Italia, entre otros se lo están pensando.